Preparativos para el evento
Según la tradición judía, es costumbre que familiares y amigos participen activamente en el evento de la brit milá, asumiendo diversos roles durante la ceremonia. Esta es una oportunidad para agradecer a sus seres queridos por su presencia en sus vidas y hacerlos partícipes del día especial de su bebé. Al planificar la ceremonia, se recomienda considerar si hay personas cercanas que podrían esperar un rol y podrían sentirse ofendidas si no lo reciben, y tratar de equilibrar los roles entre ambas familias.
Estos son los roles tradicionales en la ceremonia:
Sandak – El sandak (de la palabra griega “syndikos”, que significa “compañero”, “delegado” o “patrocinador”) es el hombre sobre cuyas rodillas se coloca al bebé durante la circuncisión. Según la tradición, Dios mismo fue el primer sandak en el pacto de Abraham. Justo antes del acto, el padre coloca al bebé sobre un cojín en las rodillas del sandak, que está envuelto en un talit y sentado en la “Silla de Elías”, para sostenerlo durante la milá.
Por lo general, se elige como sandak a una figura masculina respetada de la familia. La costumbre más extendida es que el abuelo paterno sea el sandak del primer hijo, y el abuelo materno del segundo. Sin embargo, costumbres locales, preferencias personales y consideraciones familiares pueden llevar a otras decisiones.
También se puede elegir a alguien que nunca ha sido sandak, como un abuelo que acaba de tener a su primer nieto. Es importante asegurarse de que esta persona pueda sostener al bebé de forma estable y segura. No hay impedimento para elegir a un amigo cercano para el rol. En la Edad Media, hubo mujeres que actuaron como sandak o incluso como mohelot, aunque hoy no es común asignarles este rol.
Kvaterim (acompañantes) – Los kvaterim (de la palabra “co-father”) son quienes acompañan y conducen al bebé a la ceremonia, similar a los acompañantes en bodas o funerales. Al comienzo de la brit milá, los kvaterim reciben al bebé en un cojín decorado de manos de la madre y lo pasan al padre, que está junto al mohel.
No hay límite en el número ni el género de los kvaterim. Se suele elegir a una pareja recientemente casada o comprometida como señal de bendición. Según la costumbre, la mujer recibe al bebé de su madre, se lo pasa a su pareja, y este lo entrega al padre. Otras familias eligen a hermanos, generaciones diferentes, o una cadena de familiares para entregar al bebé hasta llegar al padre.
Jeiké – Persona que transfiere al bebé desde el kvater al regazo del padre, y de ahí al sandak. A veces también hay alguien que coloca brevemente al bebé en la Silla de Elías antes de entregarlo al sandak. Este rol recuerda el traspaso de sacrificios entre los sacerdotes en el Templo.
Lectores de las bendiciones – No es obligatorio que el mohel o el padre reciten las bendiciones. Se puede dar el honor a otras personas. El primer lector dice las bendiciones con una copa de vino: “Boré pri hagafen” y “Koret habrit”. El segundo recita: “Eloheinu veloei avoteinu, kayem et hayeled hazé”, que incluye el anuncio del nombre del bebé.
El nombre puede comunicarse al lector antes, o durante la bendición mediante un susurro o un papel. El lector interrumpe tras “veyikarei shemo beYisrael” y proclama el nombre en voz alta frente a la audiencia.
Discurso o agradecimientos – Si los padres o familiares desean hablar durante la ceremonia, es recomendable preparar un discurso de antemano y coordinar cuándo se dirá durante el evento.
English
עברית